Bagels

Bagels

Los bagels son unos bollos de pan que parecen rosquillas, estas rosquillas de pan judío son originarios de Polonia. Hoy por hoy están muy de moda sobre todo en Norteamérica, en Nueva York son especialmente populares. Son una pasada, están deliciosos, están crujientes por fuera y tiernos por dentro. Tienen la peculiaridad de que se cocinan dos veces en la primera se hierven en agua y en la segunda se hornean. Valen para merendar, para cenar pero en especial tienen la fama en los desayunos rellenos de queso crema y salmón ahumado, aunque para los más amantes del dulce también los pueden tomar con mantequilla y mermelada, acompañado de un yogur cremoso. Os aseguramos que repetiréis, nosotros nos sacamos el sombrero con esta receta. Hay muchas maneras de prepararlos, unos llevan leche y otros no, nosotros nos hemos decantado por esta receta de Annie, una americana muy simpática y aquí os la dejamos, #buenprovecho

Ingredientes

Agua
125 Mililitros tibia
Leche
125 Mililitros
Levadura Fresca
15 Gramos
Harina de trigo
450 Gramos
Sal
Azúcar Blanco
0.5 Cucharadita
Mantequilla
30 Gramos
Huevos de gallinas felices
1 clara
Huevos de gallinas felices
1 yema
Agua
1 Cucharadita
Semillas de Sésamo

Cocinado: 30 min
Preparación: 120 min
Raciones: 6
1 5,0

Preparación

Cogemos un bol, en este añadimos la harina, la sal y el azúcar. Cogemos parte de la leche (70 ml aprox.) y desleimos la levadura en ella, dejándola reposar hasta que esta forme burbujas (3-5 min aprox). Formamos un hueco en el centro de la harina del bol y añadimos la leche con levadura, la leche restante, el agua, la mantequilla y la clara ligeramente batida. Con ayuda de una cuchara de madera o con una de nuestras manos vamos realizando movimientos circulares del centro hacia fuera, para ir integrando los ingredientes líquidos con los secos. Cuando tengamos una masa blanda, enharinamos una superficie lisa y amasamos durante unos 10 minutos aproximadamente. Cogemos un bol, sobre el cual hemos aceitado previamente sus paredes, introducimos la masa y le damos la vuelta para que esta se impregne de aceite, y lo tapamos con film. Dejamos reposar la masa durante 1 hora o hasta que haya doblado su tamaño, siempre en un lugar cálido. Cuando la masa esté lista la volcamos sobre una superficie enharinada de nuevo, dividimos esta en 10 porciones de igual tamaño, y les damos forma de bola cada una de ellas por separado (bolear la masa). Nos enharinamos el pulgar y lo introducimos en el centro de la bola para formar el hueco central de nuestro Bagels, les daremos la vuelta y realizaremos la misma maniobra para acabar de abrir el hueco central y realizamos unos movimientos circulares para ensanchar un poco el hueco. Colocamos los bagels en una bandeja con papel de hornear y los cubrimos con film previamente aceitado para evitar que se peguen, y dejamos reposar 15-20 minutos. Mientras tanto pondremos el horno a precalentar a 200ºC y vamos preparando una olla grande llena de agua a hervir. Cuando los bagels estén listos, iremos introduciendo de uno en uno nuestros bagels en el agua, para evitar que los bagels se estiren y pierdan la forma podéis seguir este consejo, recortad el papel sobre el que está el bagel es decir alrededor, una vez que los tengáis todos recortados iremos hirviendo los bagels de uno en uno. Cogeremos el bagel por debajo del papel y lo volcaremos sobre una espumadera para retirar el papel cuidadosamente, introducimos la espumadera en el agua y el bagel por si solo se despegara y flotará, si no sube de inmediato darle unos segundos para que flote. Dejaremos en el agua 15 segundos por cada lado y retiramos a una bandeja de rejilla forrada con papel de hornear, hasta tenerlos todos. Una vez listos dejamos al aire de 3 minutos y a continuación los pintamos con la de yema de huevo a la que le habremos añadido la cucharadita de agua, salpicamos todos nuestros bagels con las semillas de sésamo y horneamos durante 20-25 minutos aproximadamente hasta que estén doraditos.