Focaccia con tomate y aceitunas
Aunque muchos de vosotros seguramente habréis mandado de vacaciones a vuestro horno, debido a las altas temperaturas, nosotros nos negamos a privarnos de recetas tan exquisitas como esta que os traemos hoy una deliciosa focaccia. Lo cierto es que una vez que empiezas a hacer pan en casa, este te engancha mas y mas, y no puedes para de probar nuevas recetas. Qué me decís del aroma que desprende ese al hornearlo y degustar una rebanada recién hecha sola o acompañada lo cierto es que es un placer que deberíais probar al menos alguna vez. ¿Qué os parecería aplacar el hambre de una jornada de playa tras un buen baño? nada mejor que un buen trozo de esta focaccia de tomate y aceitunas, #buenprovecho.
Ingredientes
Preparación
Ponemos la harina en un bol grande, agregamos la sal, la levadura y mezclamos. Hacemos un hueco en el centro y verter tres cucharadas de aceite de oliva y el agua, mezclamos gradualmente para obtener una masa ligera y pegajosa. Volcamos la masa en una superficie enharinada y amasamos durante 10-15 minutos, hasta que quede lisa y elástica Puede ser necesario espolvorear la superficie de trabajo con harina, pero conviene no utilizar mucha para evitar que se seque demasiado la masa. Daremos forma de bola y la colocamos en un bol untado con aceite. Cubrimos con film transparente y la ponemos en un lugar cálido durante 45 minutos, hasta que la masa doble su volumen. Golpeamos la masa, añadiremos los tomates y las aceitunas picadas, y amasamos el conjunto hasta incorporar estos ingredientes. La colocamos en el molde, presionando para que la superficie quede igualada. Cubrirla con film transparente untado en aceite y dejarla en un lugar cálido para que suba de nuevo durante 1 hora. Precalentamos el horno a 220 ºC, presionamos la masa con las puntas de los dedos hasta dejar unas marcas profundas en toda la superficie. La pintamos con aceite y espolvoreamos con la sal marina, horneamos durante 15-20 minutos, hasta que se dore y quede bien cocida, retiramos del horno y esparcimos el tomillo por encima