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Crema quemada con queso mascarpone o Crème brûlées

Queridos amigos hoy os traemos una receta muy fácil, para variar, perfecta para el fin de semana. Esta receta es parecida a la crema catalana en preparación y estética, pero no en sabor, solo os diremos que esta increíble sin desmerecer nada a nuestra querida crema catalana claro. Esta receta es de la cocinera inglesa Lorraine Pascale una cocinera que nos gusta mucho y a la cual recurrimos alguna que otra vez para preparar alguna de sus recetas, aunque debemos de decir que la mayoría de las veces variamos los ingredientes, como ya sabréis «menos es más», es decir siempre intentamos hacer las recetas lo mas saludables posibles, menos grasas, menos azúcares … Consideramos que bien probada y estudiada la receta no se altera el producto, pero esta vez hemos determinado que esta receta no merecía casi modificación. Que tengáis un buen fin de semana y #buenprovecho

Ingredientes

Huevos de gallinas felices
6 yemas
Azúcar moreno
60 Gramos en polvo
Nata
450 Mililitros
Queso Mascarpone
100 Gramos
Vainilla en vaina
1
Azúcar Blanco
6 Cucharada
Jengibre en Polvo
1 Cucharadita

Cocinado: 10 min
Preparación: 10 min
Raciones: 6
1 5,0

Preparación

Cogemos un cazo, lo ponemos en al fuego y en el añadimos la nata y el queso mascarpone, agregamos también la vaina de vainilla abierta por la mitad, cocinamos hasta que rompa a hervir. Quitamos del fuego, añadimos el jengibre rallado y dejamos enfriar a temperatura ambiente para poder meterlo en la nevera en la cual estará hasta el día siguiente. El día siguiente precalentamos el horno a 150ºC, mientras que en un bol batimos las yemas con el azúcar moreno hasta que esté todo bien integrado, en ese momento agregamos la nata que teníamos en la nevera y volvemos a mezclar uniformemente.

Repartimos toda la crema en unas cazuelitas de barro individuales y las colocamos en una bandeja con agua, para poder cocinarlas al baño maría. Introducimos en el horno a 150ºC durante 30 minutos, pasado este tiempo las retiramos del horno y las dejamos enfriar a temperatura ambiente, para poder introducirlas en la nevera durante 1-2 horas hasta que estén bien firmes.

Para decorarlas antes de servir espolvoreamos azúcar blanco por encima y con ayuda de un soplete de cocina, un quemador o incluso el grill del horno durante unos segundos, crearemos una capa de caramelo sobre nuestras cremas.

Es recomendable que la decoración solo la hagáis justo antes de servirlas, ya que sino la crema absorbe el azúcar del caramelo y no parecerá caramelo.

Crema quemada con queso mascarpone varias